lunes, 9 de mayo de 2011

HÉROES POR NATURALEZA



ALEJANDRO BUZZO: EL CONQUISTADOR DE LAS AGUAS BRAVAS

por: Laura La Cruz/ Periodista y Productora TV


Conoce la historia que oculta el kayak y la manera en que lo vive su máximo protagonista en Venezuela. Quizás conociendo todo lo que él ha sorteado, tú mismo te animes a participar de esta disciplina que no entrega más que satisfacciones. Busca tu kayak, adéntrate al agua y vive una experiencia que jamás olvidarás.

Mirada profunda y apasionada son características principales de los mejores kayakistas del mundo; y es que el kayak en aguas bravas exige una perfecta armonía entre cuerpo y mente. Este deporte consiste básicamente en enfrentarse a fuertes corrientes de agua en una pequeña embarcación vulnerable al volcamiento, lo que pone a prueba no sólo el equilibrio sino el temple de los intrépidos navegantes.

No se puede decir con certeza los peligros a los que se enfrentan los kayakistas, pues existen diversos factores a considerar. Sin embargo, practicarlo es una experiencia única en la que, aunque abunden los riesgos, siempre privará la adrenalina y la concentración.

 
¿Cómo surge el Kayak?

En ocasiones, el kayak es confundido con el concepto de canoa, ésta última es una embarcación fabricada con troncos por las tribus de América, mientras que el kayak es de origen polar. Los primeros kayaks fueron elaborados hace más de 3.000 años por los pueblos norses de Groenlandia e Islandia, los aleuitanos, los lapones del norte de Europa, los inuits del norte de Canadá, y las tribus koryak y chukchi de Siberia. Su fabricación requería el uso de pieles y huesos de animales. Y desde los primeros modelos hasta entonces no se han registrado mayores variaciones en diseño pero si en los materiales utilizados, los que actualmente son artificiales.

El nacimiento del kayakismo moderno podemos ubicarlo en el año 1865 cuando un abogado escocés, John Mc Gregor, asombró a Londres al trasladarse por el río Támesis en una embarcación construida de acuerdo con las normas esquimales. Con este bote efectuó diversas travesías por ríos europeos pudiendo llegar hasta el litoral de Palestina y el río Nilo en África.


Alejandro y el Kayakismo en Venezuela

Actualmente en Venezuela, el kayak es, en sí mismo, un deporte extremo de gran acogida que, por además, sirve de complemento para otras disciplinas competitivas. Gracias a ello, existen diversos exponentes que se han tomado muy en serio esta actividad y han reinado tanto en aguas nacionales como internacionales. Se han logrado ganar el respeto y la admiración de todos. Entre ellos destacan el gran Sr. Jorge Buzzo, un argentino “venezolanizado” que ha recorrido todas las costas y ríos más bravos de Venezuela con su kayak, y
el hijo de esta luminaria deportiva, Alejandro Buzzo, considerado el mejor kayakista de aguas bravas de Venezuela, el neptuno venezolano.

Alejandro Buzzo es diseñador industrial, asesor e instructor de canotaje especializado en aguas bravas y travesías, fabricante de kayaks de fibra de vidrio (bajo la marca familiar Kayaman), guía de kayak y rafting en ríos de alto y bajo volumen de agua, productor de eventos de canotaje autóctono, travesías y aguas bravas, secretario general de la AVAB (Asociación Venezolana de Aguas Bravas) y poseedor de las dos primeras medallas de oro internacionales para Venezuela en canotaje.  Dado a todo ello, se puede afirmar, que a sus 36 años, ha dedicado toda su vida al deporte acuático. No podía ser de otra forma, ya que Alejandro asevera que el kayak y su pala son los instrumentos que utiliza para expresarse.

Su pasión: El mar y las aguas bravas de los ríos venezolanos…

Alejandro Buzzo heredó la pasión por el kayak como estilo de vida y  fin exploratorio, de su padre. Pero su espíritu competitivo, aquel que le inspiró a participar en diversas competencias internacionales y obtener así las mejores posiciones, se lo debe al entrenador cubano Renné Romero, ilustre del canotaje que logró hacerle atractiva la parte competitiva gracias a sus técnicas. El entrenador Romero también tiene entre sus méritos el escribir el libro “Información sobre canoa kayak”, una guía indispensable para entrenadores de canotaje, con variada información metodológica para la conformación de tripulaciones, tecnologías para el control de las cargas por zonas de esfuerzos y niveles de desplazamiento de  embarcación en el agua.

Gracias a esa mezcla entre pasión y conocimiento, Buzzo logró ser el capitán de la selección Nacional Junior venezolana; competir en un sudamericano en argentina y obtener allí dos medallas de bronce; participar en un panamericano, sudamericano e iberoamericano en Venezuela y ganar las primeras medallas de oro de canotaje internacional para el país en el K4. Igualmente, hizo una travesía de 85 Km de Bonaire a Curacao. En la actualidad, se prepara para hacer el cruce desde la costa venezolana al Archipiélago de Los Roques; un recorrido bastante largo al que desea darle una connotación antropológica, ya que los indígenas caribes realizaban esta ruta con fines rituales.

Alejandro Buzzo ha navegado casi toda la costa venezolana, confiesa que su trayecto  predilecto es la ensenada La Tuja, en el estado Aragua, un paraíso tropical de aguas cristalinas ideal para las actividades acuáticas, ya que es el lugar más profundo en menor distancia hacia el mar y esto hace que animales como atunes, ballenas y delfines que se acercan a Venezuela, puedan ser divisados sin el menor esfuerzo.

Venezuela ofrece múltiples escenarios para la práctica del canotaje y el rafting. Éste último se realiza principalmente en cuatro regiones: en el río Orinoco -que es donde comercialmente se inicia gracias a su padre y mentor Jorge Buzzo-, en los estados Sucre y Anzoátegui (en la parte occidental del río Neverí, en el río Yuruaní), en la parte suroriental de la Gran Sabana y en el estado Barinas (en sus distintos ríos como el Siniguí, el Acequias y el Santo Domingo). Alejandro acompaña a propios extraños en su recorrido aventurero por los ríos barineses, y es que es allí donde funciona su campamento y donde tiene su hogar junto a su esposa Fabiana, quien es su gran apoyo y base terrenal, y según palabras del propio Alejandro,  “Fabiana es la compañera perfecta para la consecución de sus metas”.


El Kayak,
su negocio de vida y preocupación por las
comunidades locales

Cuando Alejandro llegó a Barinas le tocó impulsar y enseñar a la comunidad, y en especial a los trabajadores del sector el kayak en aguas bravas “para que se practicara de una manera más segura y didáctica” ello porque Buzzo y su padre son los precursores de aguas bravas en Venezuela, pues anteriormente no se conocía a nadie que se dedicara a fomentar y llevar el tema desde otro lado que no fuera el comercial. Fue un trabajo arduo pero fructífero. Y ahora, gracias a él y a otro grupo de kayakistas venezolanos, contamos en el país con un nutrido grupo de profesionales en el área dispuestos a atender e instruir a todos los visitantes que deseen dejarse llevar por las bravías aguas blancas.

La navegación en aguas bravas también llamada “rápidos”, consiste en descender por ríos turbulentos  y recorrer su cauce en dirección a la corriente. Por la naturaleza de la actividad, se requiere un estricto apego a las técnicas básicas de paleado y rescate, al equipo y a la seguridad (nunca olvidar el uso del casco). Todo ello es indispensable, aún cuando se cuente con un guía experto. De igual manera, es importante que el practicante siempre esté acompañado para minimizar así cualquier riesgo.

Seguramente, en este mismo momento de lectura, “Alejo” estará navegando algún río venezolano acompañado de esa mirada penetrante que refleja el verde de sus ojos, que han visto una y otra vez esa manifestación divina llamada aguas bravas. Su piel posiblemente estará gozando del choque de esa chispeante espuma blanca al toque de un kayak fabricado por él mismo. Seguramente estará en ese río lleno de la más extraordinaria biodiversidad que lo tranquiliza y que, cada día, le muestra los distintos puntos de vista de una situación, como cuando ve un raudal y lo estudia para conocer su dificultad. Probablemente, justo ahora, esté disfrutando -con su risa casi infantil- de su pala, de su embarcación y de esas aguas que lo llevan cada instante a superar sus propios límites, sus pensamientos, sus miedos… y tú ¿qué esperas para vivir una apasionante aventura acuática en kayak, nada más y nada menos que de la mano de Alejandro Buzzo?
















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